El sábado 22 de octubre, un contingente de casi cuarenta alumnos pertenecientes al Instituto Misionero (IM) de la Facultad de Ciencias de la Salud (FCS) viajó hasta la localidad de Loreto, ubicada a 205 kilómetros de la capital de la provincia de Corrientes.
«Todo comenzó como una idea gestada en el seno de una clase de Escuela Sabática (ES), en la iglesia de la Universidad —explica la Lic. Valentina Romaniuk, parte del liderazgo del IM—. Uno de los integrantes de esta clase es oriundo de Loreto y compartió con el grupo sus ansias de que el mensaje adventista llegue hasta esos lugares».
El Pr. Héctor Gerlhorn, en representación del grupo de ES, presentó la iniciativa al IM de la FCS y allí comenzó un plan que cambiaría esa localidad correntina, que posee una población que no supera los cinco mil habitantes.
Se comenzaron las tratativas con el municipio de Loreto, y el plan fue recibido auspiciosamente por el Dr. Sebastián Torales, intendente municipal. Fue así que, desde el gobierno municipal y el grupo de la UAP, se dio forma a una Expo Salud que se llevó a cabo en el centro cívico de esta localidad.
Alrededor de cuarenta alumnos pusieron en marcha este plan. A través de la educación y la prevención, las personas aprendieron aspectos relacionados con la salud, teniendo a los ocho remedios naturales como eje del programa. La exposición contó con ocho estaciones, en cada una de las cuales se trató uno de los remedios naturales.
Antes de ingresar al programa, los participantes se inscriben en la recepción, donde se les realiza una evaluación de factores de riesgo para enfermedades crónicas. Posteriormente, recorren las estaciones de descanso, agua, ejercicio, luz solar, aire, alimentación, equilibrio y esperanza en Dios.
Más de cien personas se presentaron y recibieron atención, de las cuales setenta aceptaron la invitación a estudiar las Sagradas Escrituras.
«Si hay algo que al grupo del IM sorprendió fue la tranquilidad y sencillez del lugar. La gente hacía cola esperando ser atendida, pero no veías ninguna queja; por el contrario, todos esperaban su turno, contentos de participar en esta actividad» confiesa la Lic. Romaniuk.
Pero aquí la historia no termina, sino que en realidad comienza. Ricardo y Dina Areco, miembros de la clase de ES que comenzó este proyecto, decidieron ir un año a Loreto, con el fin de atender los setenta pedidos de estudios bíblicos que dejó esta Expo Salud. «Dios propuso este plan en nuestro corazón y estábamos esperando que su voluntad se cumpliera en nosotros. Hace cinco años que residimos en Libertador San Martín y será un honor servir al Señor en este tiempo que vamos a convivir como voluntarios misioneros en Loreto», afirmó Ricardo.

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