29 Jun
El viernes 23 de junio, en el templo de la Universidad Adventista del Plata (UAP), se vivió un momento muy gratificante y significativo para la comunidad educativa de la Institución. Ciento veinte jóvenes, de diferentes carreras y nacionalidades, alcanzaron su cometido de capacitarse y graduarse en la Escuela de Misión (EM). El Mag. Horacio Rizzo, rector de la UAP, y el Pr. Darío Maldonado, coordinador de Servicio Voluntario Adventista en la Universidad, hicieron entrega de los certificados, junto al grupo de líderes y voluntarios que conforman la comisión de EM 2017. Este espacio nació en 2012 con el fin de preparar y motivar a aquellos que pretenden ser voluntarios con el fin de compartir el mensaje evangélico en diferentes países del mundo. EM es un programa que depende del área del Servicio Voluntario Adventista que funciona en la Universidad.
Estos alumnos recorrieron un cuatrimestre lleno de desafíos. Escuela de Misión tiene como propósito capacitar de manera dinámica, así que cada viernes se contó con la participación de distintas personas que experimentaron el servicio en otros lugares del mundo, quienes compartieron sus testimonios: vivencias, temores, luchas, alegrías. De esta manera, el auditorio comprendió que solo en manos de Dios se puede ser un instrumento en su obra. También, este espacio de capacitación invitó a profesores, pastores, médicos misioneros y profesionales capacitados en temas específicos para que expusieran acerca de religiones, aculturación, contextualización, transmisión del mensaje, cosmovisión, islamismo y evangelismo en las grandes ciudades, entre otros.
Además, este grupo participó en un campamento con charlas intensivas respecto a la misión. Pudieron completar la lectura de un material esencial y significativo para la tarea, el libro Pasaporte para la misión. Finalmente, la coronación de este esfuerzo se concretó en la ceremonia de graduación. «Fue un evento muy llamativo y colorido, explica Brenda Duros, componente del equipo de liderazgo de este espacio de capacitación—. Más de cien jóvenes voluntarios para la misión, vestidos con atuendos típicos de diferentes países (Sudáfrica, Brasil, Corea, Japón, Paraguay y Rusia, entre otros) y culturas del mundo vivieron una gran fiesta que trascendió los límites del templo universitario. Estoy convencida que esta alegría también se sintió en el Cielo, al ver a estos estudiantes involucrados y comprometidos con la misión de llevar buenas nuevas de salvación. ¡A Dios sea la gloria!».
Para la segunda etapa del año, se abre la posibilidad de aprender nuevos idiomas, en la propuesta que se conoce como «Escuela de Idiomas para la Misión», en donde se podrá aprender inglés, ruso, portugués e italiano, cada viernes de 17:00 a 18:30, siempre con el ideal de estar preparados para compartir el amor de Jesús al mundo.
Elena de White escribió en la página 162 del libro El deseado de todas las gentes: «Cada verdadero discípulo nace en el reino de Dios como un misionero». Esta afirmación se corresponde con uno de los objetivos de la UAP, que es formar misioneros para cumplir el mandato de Cristo de predicar el evangelio a todo el mundo.